Era martes, Luis tenía que hacer sus tareas rápido, porque había quedado con sus amigos a las seis en punto, y ya eran las cinco. Luis se dio mucha prisa, pero cuando terminó ya eran las seis y media. Luis ya no tenía ganas de salir, pues se le quitaron cuando miró el reloj. Luis vio debajo de su cama un libro que se titulaba “Las aventuras de Pepe” y aunque no le gustaba leer, empezó a leer. Luis se pasó toda la tarde leyendo y termin de leer a las una de la mañana, cuando ya había terminado el libro.
Por la mañana Luis se levanto rápido y se fue al colegio. Ese día todos los niños estaban muy nerviosos porque les daban la vacaciones de verano. Cuando Luis llegó a su casa, comentó a su familia que de mayor iba a ser aventurero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario